EL APARATO CIRCULATORIO EN ALPINISMO:

Hay muchos factores que afectan a la circulación sanguínea y que harán que la sensación de frío sea mayor o menor en un determinado momento.


La talla del guante a la hora de hacer alpinismo es muy importante que no vaya ni demasiado justo ni holgado. Si nos queda un poco pequeño es posible que las costuras comiencen a descoserse antes además de que puede que el propio guante, al apretarnos demasiado, limite un poco la circulación sanguínea de nuestros dedos generando así una sensación mayor de frío. Por otra parte si el guante nos va holgado tendremos pérdidas de calor y seguramente un confort mucho menor.

* LA HIPOXIA ALVEOLAR

Provoca una hipertensión arterial pulmonar precapilar, que asociada al aumento del gasto cardíaco, conlleva modificaciones importantes en la hemodinámica pulmonar. La hiperventilación provoca una alcalosis respiratoria que interferirá en la regulación de la circulación cerebral.

* CONSECUENCIAS DE LA FALTA DE OXÍGENO SOBRE EL ORGANISMO EN EL:

- CEREBRO: Modificación de la permeabilidad, Insomnio, Dolor de cabeza, Inapetencia, Trastornos del comportamiento…
- PULMÓN: Control de la ventilación, fatiga…
- CORAZÓN: Retención de agua, edema (hinchazón de los tejidos debido al escape de líquidos fuera de los vasos sanguíneos)…

Estos fenómenos todavía no son bien conocidos. Determinan importantes modificaciones del metabolismo hidroelectrolítico. De esta manera, en el curso de la aclimatación normal, el volumen plasmático disminuye, pero el agua total aumenta. El conjunto de los líquidos circunlantes se desplaza de la periferia al centro, contribuyendo todavía más a la sobrecarga de la circulación pulmonar. En algunas personas mal adaptadas se presenta un desequilibrio hidroelectrolítico con retención hídrica. La tensión arterial, mínima mente alterada en reposo, se eleva con el ejercicio al cabo de algunos días de estancia en la montaña. Las arterias y las venas de la retina, testigos de la circulación cerebral, observadas en el fondo del ojo, muestran dilataciones y pueden producirse hemorragias. El descenso de la presión higrométrica, asociada a la hiperventilación, aumenta la pérdida de agua por las vías respiratorias y favorece la deshidratación. El aumento de los glóbulos rojos y la disminución del volumen plasmático, agravado por la deshidratación, son responsables del aumento de la viscosidad sanguínea. Esto puede provocar trastornos en la microcirculación, favoreciendo la aparición de trombosis y congelaciones.